El alcalde de Valencia, Joan Ribó, inauguró ayer la conferencia final del proyecto TAKEDOWN, un proyecto financiado por el programa europeo Horizonte 2020 en el que participan 18 instituciones europeas, entre las que se encuentra la Fundación Euroárabe. La conferencia ha reunido a más de 150 personas de 18 países y 34 expertos y expertas procedentes de instituciones europeas y norteamericanas.

“Nuevos enfoques para la Lucha contra la Radicalización, el Terrorismo y el Crimen Organizado”

Conferencia final del proyectoTAKEDOWN // Valencia, 18 de junio.

  • El alcalde de Valencia, Joan Ribó, inauguró ayer la conferencia final del proyecto TAKEDOWN, un proyecto  financiado por el programa europeo Horizonte 2020 en el que participan 18  instituciones europeas, entre las que se encuentra la Fundación Euroárabe.  
  • La conferencia ha contado con un plantel de 34 expertos procedentes de instituciones europeas y norteamericanas como el Real Instituto Elcano (España), la Red Europea Judicial contra la Ciberdelincuencia, el Centro Internacional para el Estudio de la Radicalización (Reino Unido) y la Universidad de la Mancomunidad de Virginia (Estados Unidos), entre otros.

- Un momento de la Conferencia.

Con la conferencia “Nuevos enfoques para la Lucha contra la Radicalización, el Terrorismo y el Crimen Organizado” se cierra el trabajo que durante 3 años ha desarrollado el proyecto TAKEDOWN,  considerado por la Comisión Europea como un ejemplo de "éxito" en la consecución de los objetivos planteados: investigar los aspectos sociales, psicológicos y económicos del terrorismo y del crimen organizado así como su impacto en la cohesión social, con vistas a desarrollar herramientas de prevención e intervención dirigidas a profesionales del sector.

La conferencia, celebrada ayer en la sede de la Policía Local de Valencia, ha reunido a más de 150 personas de 18 países. Miembros de fuerzas y cuerpos de seguridad, gestores de proyectos relacionados con la actividad de  este proyecto e investigadoras e investigadores de distintas disciplinas y profesionales del sector.

Durante la jornada se han presentado los resultados de TAKEDOWN, entre los que se destaca la plataforma digital First Line Practitioners, una innovadora herramienta de formación, asesoramiento e información, destinada a profesionales que trabajan con personas vulnerables a procesos de radicalización como trabajadores sociales, educadores, psicólogos o agentes de policía.

Los distintos debates de alto nivel planteados en la conferencia han abordado  algunos de los principales temas en los que ha trabajo el proyecto en los últimos tres años:  el  vínculo entre crimen organizado y terrorismo, la radicalización en prisiones, la cooperación entre actores clave y la prevención y lucha contra el terrorismo,  el cibercrimen organizado, así como los aspectos financieros del terrorismo y el crimen organizado que amenazan la seguridad de la Unión Europea y de su población.

- Intervención de Inmaculada Marrero, secretaria ejecutiva de la Fundación Euroárabe.

De la gravedad de la radicalización

El aumento del número de ciudadanos europeos que son reclutados como combatientes extranjeros o como miembros de estas redes criminales explica la gravedad de estas amenazas y la preocupación de los gobiernos, que vienen  incrementando las partidas presupuestarias destinadas a prevenir y luchar contra el terrorismo y el crimen organizado.

En este sentido se ha pronunciado José Luis Serrano, jefe de área del Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado del Ministerio del Interior (CITCO) , quien ha afirmado que “las instituciones europeas no han sabido calibrar la gravedad de la radicalización como amenaza a la seguridad de sus estados miembros”.

Por su parte Florian Huber, director de proyectos de SYNYO, la compañía austríaca coordinadora de TAKEDOWN, ha manifestado que estamos ante un grave problema ya que está entrando en la economía regular más dinero procedente de la delincuencia a través del blanqueo de dinero, la especulación inmobiliaria, el tráfico de drogas y la trata de personas. Para Huber, “esta investigación es vital si queremos entender las causas subyacentes de la radicalización o la motivación para involucrarse en el crimen organizado, por ejemplo, la desigualdad social o la exclusión”.

En esta dirección ha apuntado también David Webber, de la Universidad de la Mancomunidad de Virginia, quien ha insistido en la importancia de abordar “la motivación psicológica de los extremistas, las ideologías políticas que justifican el uso de la violencia y del terrorismo y la mecanización de las relaciones sociales de los terroristas”. “Es muy difícil, ha añadido Weber, encontrar una narrativa tan atrayente como la que ofrecen los grupos extremistas quienes se aprovechan de la necesidad de las personas de sentirse importantes”.

- Intervención de David Webber

Daniel Hooton, responsable de la Strong Cities Network – Red de Ciudades Fuertes- del Instituto para el Diálogo Estratégico, ha manifestado durante su exposición sobre los programas de prevención de la radicalización que éstos “adolecen de una infraestructura sólida de prestación de servicios para los profesionales sobre el terreno y de un marco político claro que integre los planes de acciones locales en la arquitectura de las políticas nacionales de los distintos países”.

Sobre la importancia de las redes sociales

Una de las particularidades de las redes terroristas de hoy respecto a las tradicionales es la presencia y el incremento del uso de las redes sociales.

A este respecto se ha pronunciado Sandra Cardoso, directora de tecnologías para la empresa Insikt Intelligence para quien en la última década se han alterado drásticamente el funcionamiento de las cédulas terroristas "proporcionándoles un espacio desde donde dirigirse a una audiencia mundial, comunicándose entre ellos perdidos en el desorden de miles de millones de conversaciones y propagando su ideología sin control”. “Esto supone, ha añadido, un enorme desafío pues el odio y la propaganda radical pueden difundirse a un ritmo nunca antes imaginado pero también una oportunidad para las fuerzas y cuerpos de seguridad pues la naturaleza pública de las redes sociales expone al delincuente potencial, sus relaciones y sus planes para ser más fácilmente reconocidos y abordados”.

El proyecto TAKEDOWN está conformado por un consorcio formado por 18 entidades de 13 países diferentes: Alemania, Austria, Bélgica, Bulgaria, Eslovaquia, España, Israel, Italia, Polonia, Reino Unido, República Checa, Rumanía y Suiza. Como organizaciones españolas figuran la Fundación Euroárabe de Altos Estudios, en Granada, la Policía Local de Valencia y el Instituto de Derecho y Tecnología de la Universidad Autónoma de Barcelona.

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